El Senado bonaerense volvió a sesionar ayer, dando despacho a una serie de pliegos de 42 jueces que generaron polémica en el oficialismo, y que no tuvieron la aprobación en Comisión tras el rechazo de la oposición.
Entre ellos se encuentra uno con especial sensibilidad: el Tribunal de Casación penal, el máximo organismo de apelación en la materia ante de la Suprema Corte provincial.
Los mencionados pliegos fueron rechazados por la oposición en la reunión de Comisión de Asuntos Constitucionales y Acuerdos, haciendo hincapié en su negativa al nombre de Francisco Pont Vergés, actual secretario de Política Criminal, Coordinación Fiscal e Instrucción Penal del Ministerio Público.
Tampoco sentó bien en el peronismo la propuesta de Ana Julia Biasotti, defensora adjunta del Tribunal de Casación, de quien -además de Pont Vergés- los bloques peronistas solicitaron los antecedentes.
Además de estos dos pliegos que buscan acuerdo en el Senado, otros 16 jueces de distintos fueros, 7 defensores oficiales, 17 Agentes Fiscales y 1 asesor de incapaces ya obtuvieron el dictamen de mayoría en la Comisión.
En el debate de ayer, la senadora María Teresa García pidió una moción que modifique el destino de los expedientes para que permanezcan en comisión, asegurando que “no es caprichoso, sino que consideramos que a pocas semanas de las elecciones generales, en las que estimamos que abra nuevas autoridades en el Gobierno, nos parece erróneo y poco prudente cristalizar personas en la Justicia”. García.
La legisladora del Frente de Todos pidió “poner en un paréntesis decisiones que afecten a la nueva gestión, independiente de la historia que tenga cada uno de los pliegos”, al evaluar que “no podemos comprometer estructuras futuras en la Justicia”.
Desde el oficialismo, el titular de la bancada de Juntos por el Cambio, Roberto Costa, recordó que “cuatro años atrás, esos pliegos no habían sido aprobados porque no tuvieron quórum y segundo porque no se están creando nuevas estructuras, sino que se están nombrando magistrados para lugares vacantes”.
Fuente: La Tecla