La Comuna destacó la tendencia en baja de los últimos tres años, y lo atribuyó a sus activas políticas de salud. No obstante, las cifras locales están aún por encima de la media provincial.
El Municipio de Quilmes aseguró que según datos registrados de 2020 y 2021, se redujo la mortalidad infantil “drásticamente, ubicándola en los niveles más bajos de la historia municipal”, afirmó.
Estos resultados, agrega el informe de la Comuna, “son el resultado del trabajo que lleva adelante la gestión de Mayra Mendoza con una articulación clave con el Gobierno Provincial, a través del ministerio de Salud, lo que derivó en una mejora sustancial del sistema sanitario local para promover una salud de calidad, impulsando el trabajo en líneas priorizadas que ayuden a cuidar las infancias en todo el distrito”.
A través de datos brindados por la cartera sanitaria bonaerense “se puede observar la tendencia al descenso, que se ve reflejada en comparación a los datos de 2019 cuando la mortalidad era del 10,19 cada 1.000 nacidos vivos, mientras que durante en los primeros dos años de gestión disminuyó significativamente para ubicarse en 8,96 cada 1.000 nacidos vivos en el año 2021”, se añadió.
“Es un avance enorme en materia de cuidados de la salud particularmente del embarazo y del recién nacido. Con estos resultados se está empezando a ver el impacto de las políticas sanitarias que se están llevando adelante en Quilmes”, destacó Mayra Mendoza, quien resaltó todo el trabajo que se viene realizando en materia de salud en estos últimos cuatro años.
Para alcanzar a este logro el Municipio “está llevando adelante distintas acciones que contribuyen al cuidado del embarazo y del recién nacido entre los cuales se destacan: garantizar el acceso a controles de embarazo en todos los centros de salud; aumentar los turnos para los controles de embarazo de alto riesgo en el Hospital Oller y en el Iriarte; trabajar en articulación para que los recién nacidos accedan a su primer control en el centro de salud más cercano a su hogar, yéndose de alta de la maternidad con el turno en mano; duplicar las camas en la comuna, ampliando la posibilidad de atención; y la readecuación de salas pre-parto y parto de los Hospitales Oller e Iriarte, y mejora de la articulación con el Hospital Iriarte, para garantizar el derecho al parto respetado”.
Además “se construyeron 4 Centros de Atención Primaria de Salud (CAPS) y se puso en valor uno que se encontraba en condiciones precarias; se amplió el acceso a métodos anticonceptivos y se adquirieron nuevos equipamientos para ginecología y obstetricia, en particular para la colocación de DIU; se garantizó el acceso a la interrupción legal del embarazo en todos los centros de salud del distrito, para promover maternidades deseadas; se promueve la vacunación de embarazadas, puérperas y niñez en todos los efectores de salud del distrito, búsqueda activa y operativos territoriales semanales que promueven el acceso a la inmunización; y se implementó el Programa Qunita Bonaerense que brinda un kit para el cuidado y la crianza”, enumeró la Comuna.
Si bien lo importante de la mortalidad infantil es evaluar la tendencia durante los años, “históricamente Quilmes se ubicaba entre los municipios que mayor mortalidad infantil tenía, y hoy ya estamos viendo un cambio en esa tendencia con dos años consecutivos que confirman esta disminución y ubican a Quilmes por debajo del promedio regional”, expresó al respecto el secretario de Salud local, Jonatan Konfino.
La mortalidad infantil es un término utilizado para describir las muertes de menores de 1 año, se calcula relacionando el número de muertes de menores de 1 año con el número de nacidos vivos registrados. Existe un conjunto de factores que influyen y determinan el nivel de esta tasa: biológicos, demográficos, socioeconómicos, culturales, ambientales, de atención de la salud y geográficos.