En un fallo del juzgado 6 de Florencio Varela, se ordenó que un falso Pai Umbanda y su hija vayan a juicio por jurados acusados de haber abusado sexualmente de dos niñas de 14 años en el barrio San Rudecindo.
Con el testimonio de las víctimas y su padre, el juez Diego Agüero tuvo por demostrado que Ramón T. (62) se hacía pasar por Pai umbanda y la hija Débora (34) cuando las niñas de la familia cumplían los catorce años, las obligaba a qué pierdan la virginidad con su abuelo, haciéndoles creer que era un ritual umbanda para espantar malas energías y evitar ser abusadas en la calle.
Agüero después de estudiar el informe como amicus curiae a Alejandro Frigerio, antropólogo del CONICET, especialista en región afrobrasilera, concluyó que lo que hacían los detenidos era un engaño para abusar de las niñas.
Explicó en un extenso fallo, un caso de la comunidad wichí de Salta que se acusaba a un mayor de edad casarse con una menor y la defensa sostenía que lo hacían respetando una conducta ancestral.
En el caso el juez de Varela dijo que no tenía que tratar la doctrina de Derechos Humanos de relativismo cultural porque el hombre y la mujer habían utilizado la religión umbanda para engañar a las mujeres y cometer delitos sexuales, explicando los rituales del umbandismo y de otras religiones, no encontrando algo ni parecido al aberrante hecho por el que irán a juicio, padre e hija; abuso sexual con acceso carnal agravado y suministro de material pornográfico.
La sentencia terminó con cuatro párrafos en lenguaje sencillo, dos para los detenidos explicándoles que seguirán detenidos hasta por lo menos el juicio y dos para las niñas comunicandoles lo mismo y que sepan que no era un ritual umbanda lo que habían hecho, que se trató de un engaño de su abuelo y madre para violentarlas en forma sexual.