La Vicaría de Solidaridad de la diócesis de Quilmes se pronunció ante el desalojo, por parte de la policía, de los trabajadores de la planta Kimberley Clark que reclamaban por sus puestos de trabajo tras el cierre de la fábrica ubicada en Bernal.
“Ante el desalojo, en horas de esta madrugada, de las familias trabajadoras que defendían su fuente de trabajo en la planta de Bernal, queremos acercar nuestra solidaridad y el pedido de justicia a los responsables de esta situación”, expresaron en un mensaje.
“No parece que la represión sea una respuesta, en estos momentos de crisis económica y social, al pedido genuino de estas familias defendiendo el trabajo y la dignidad de sus vidas”, consideraron.
Los trabajadores de Kimberly Clark fueron desalojados de la planta en la madrugada del 4 de diciembre por efectivos de la Policía Bonarerense que ingresaron armados. El lugar había sido tomado luego de que la firma decidiera cerrar esa sede de la histórica papelera. La fábrica cerró en septiembre y dejó a 200 trabajadores en la calle”; finaliza el comunicado.