Antonio de la Cruz, de 54 años, sobre el que pesa una calificación legal que podría derivar en que pase el resto de sus días privado de la libertad, en caso de ser hallado culpable, se negó a declarar ayer ante el fiscal, Darío Provisionato. En la sede judicial se llevó adelante la indagatoria y el dominicano seguirá detenido. Hay elementos en la causa que comprometen al extranjero ya que en el allanamiento en una finca donde residía se encontró ropa con manchas hemáticas.
El sospechoso había realizado la denuncia de la desaparición hace más de 15 días, participado de la búsqueda y ahora se encuentra en prisión proceso por el femicidio.
El descubrimiento de una pierna izquierda, torso y manos -cortados “con precisión”- en bolsas de nylon, en un descampado de Kilómetro 26,700, dio un giro cuando efectivos de la comisaría 2da, mientras restrillaban la zona, encontraron carteles donde se buscaba el paradero de Francisca Aquino, quien se desempeñaba como empleada doméstica en Ciudad de Buenos Aires. Los carteles los habían hecho sus amigas que, además de identificar la bijouterie que tenía, revelaron que era víctima de violencia de género por parte de su concubino.
Ayer De la Cruz fue llevado a las fiscalías, es asistido por el defensor oficial, Víctor Mastronardi, el dominicano se negó a declarar luego de ser notificado de los cargos que pesan en su contra. “Las amigas afirmaron que Aquino era víctima de violencia de género por parte del sujeto, que había denunciado la desaparición de la víctima hace 15 días en Capital Federal. Creemos que lo hizo como una maniobra dilatoria y eso hizo sospechar a los investigadores”; no se descarta que la fallecida haya sido víctima de trata y se analiza esa línea de hipótesis.