Finalmente, el joven Pablo Ventura, el onceavo detenido por el brutal crimen de Fernando Báez Sosa en la puerta del boliche Le Brique en Villa Gesell, fue sobreseído por el juez de Garantías local, David Mancinelli.
A tres semanas del asesinato, el magistrado consideró “probado” que el joven remero nunca estuvo el fin de semana del asesinato en el balneario bonaerense.
Así, se desestimó la mención de Ventura por parte de los rugbiers al momento de ser detenidos.
Por lo se terminó siendo un “chiste”, el remero estuvo cuatro días detenido por un crimen ocurrido a 480 kilómetros de donde estaba. El joven no se opuso a su arresto, contestó todas las preguntas de la fiscal en la indagatoria, entregó su celular y la declaración testimonial de amigos para demostrar que no estuvo en Gesell.
Ahora Pablo reinicia su vida volviendo a practicar el remo en un club náutico en Zárate. Demandará en el fuero civil a los diez jóvenes que lo acusaron.