“Sé que mi hija fue a parar en manos de psicópatas”, manifestó Silvia Pérez Vilor, la madre de Anahí Benítez ante los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 7 que desde ayer comenzaron a ventilar el femicidio de la joven que estuvo desaparecida durante seis días y finalmente su cadáver fue encontrado en la Reserva Natural Santa Catalina, en 2017. Por el hecho, están imputados a Marcelo Villalba y Marcos Bazán. La defensa del primero de ellos presentó una pericia que indica que no está en condiciones de afrontar el juicio por estado de “psicosis irreversible”.
Durante los anticipos de pedido de pena el fiscal a cargo, Hugo Daniel Carrión, afirmó que intentará probar que “en el período que comprende del 29 al 3 de agosto de 2017 se llevaron a cabo distintas acciones y división de tareas, que Bazán facilitó el lugar, prestó cooperación por la cual no hubiese podido llevarse a cabo la acción y que ambos imputados tomaron la decisión de matarla”. Y en caso de Bazán –de no probarse lo anterior- planteó una acusación alternativa y subsidiaria de encubrimiento agravado.
Por su parte, el abogado de la familia de Anahí Benítez, Guillermo Bernard Krizan, aseguró que estaba de acuerdo con lo planteado por el representante del Ministerio Público Fiscal pero no adhirió a la acusación alternativa.
La defensa de Bazán integrada por los doctores Eduardo Soares y María del Rosario Fernández, indicó que “no le costará demostrar la absoluta falta de responsabilidad en la acusación principal y alternativa presentada por la fiscalía”.
En cuanto a la forma en que se desarrolló la búsqueda tras la desaparición, la madre de la víctima, expresó ante el Tribunal que “no se investigó bien”. Silvia Pérez Vilor fue la primera testigo, luego de que se negaran a declarar Bazán y Villalba. “Me llamó la atención que todas las fuerzas del país no la pudieran encontrar viva estando a pocas cuadras de mi casa”, recordó.
A su vez, indicó que un testigo se acercó hasta su casa y le comentó que sabía lo que había pasado con su hija. “Me relató que a Anahí la habían llevado a una casa de la calle Santa Filomena, propiedad de un tal ´gordo maní. Ahí fue drogada, violada y luego llevada a las Reserva el 31 de julio. Me contó que Villalba estuvo en esa casa”.
Pérez Vilor también relató que le llamó la atención el comportamiento del novio de su hija semanas antes de la desaparición y durante la búsqueda. “Pasamos de tomar cuatro o cinco horas de mate a darme un saludo esquivo”, aseveró.
Además, Alejandra, una vecina de Bazán, declaró que durante la búsqueda de la joven observó fuego cerca de la casa del acusado. “Me llamó la atención que una noche vimos una fogata enorme cerca de la casa de Marcos y a la madrugada escuchamos que los perros no paraban de ladrar”.
Y agregó: “Le pregunté a mi hijo que será que se está quemando y me dijo: ‘seguro está quemando la droga que la policía no le encontró”.
Minutos antes del finalizar la audiencia Roberto Fernández, abogado de Villalba, expresó que se realizaron dos pericias psiquiátricas donde se determinó que al Marcelo Villalba “no está en condiciones de ser sometido a juicio por el cuadro casi irreversible de psicosis que padece y el plateo es que se suspenda el debate sólo en el caso de Villalba porque no está en condiciones en los términos del artículo 63 de defenderse en juicio”.
Cabe recordar que Villalba es el más comprometido de los dos imputados: en el cuerpo de Anahí se encontró su ADN. Además, tiene una condena firme por abuso sexual.
Tras un cuarto intermedio, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 7 integrado por los jueces Roberto Conti, Elisa López Moyano y Roberto Lugones decidió que el próximo jueves 20 se escuche a los profesionales que realizaron las pericias psicológicas y la realización de una junta médica.
Fuente: Diario Conurbano