Un vigilador de San Francisco Solano fue condenado por el Tribunal Oral Criminal N° 4 de Quilmes a la pena de 5 años y 6 meses de prisión, acusado de haber abusado sexualmente durante nueve años de la hija de su expareja en la casa que compartían.
Para los jueces quedó acreditado que los hechos se dieron años atrás en una finca de la calle 806 en la localidad quilmeña. En los considerandos dieron crédito al relato de la víctima en las audiencias de debate en la sala del tercer piso de Penales: “les narre todo a mi padrino y al final ahi me creyeron”. “El nos pegaba constantemente (en relación al imputado)”, recordaron los jueces en su pronunciamiento.
Asimismo se valoró el informe de la perito que especificó a consultas que “la menor estaba ubicada en tiempo y espacio, con un relato estructurado, sus dichos son compatibles con los de una persona que ha sido víctima de abuso”. José María Spinetti se mostró en varios tramos de la declaración de la víctima durante el juicio como contrariado, no pudiendo creer lo que la denunciante relataba ante los jueces del Tribunal Oral 4, Alberto Ojeda, Andrea Calaza y Mario Caputo.
El fallo fue dado a conocer esta semana por los magistrados.