Un femicidio vuelve a sacudir a la región, luego de confirmarse el crimen de Nara Ludmila Flores, una joven de 19 años, ocurrido días atrás en la localidad de Ingeniero Allan de Florencio Varela. Inicialmente reportada como víctima de un incendio, la autopsia reveló que fue asesinada antes de que las llamas consumieran su hogar. Su novio, M.H., de 21 años, fue detenido como principal sospechoso del femicidio.
El hallazgo se produjo el 31 de octubre en la localidad de Ingeniero Allan, donde Nara fue encontrada carbonizada en su cama. Los forenses, bajo la dirección de la fiscal Mariana Dongiovanni de la UFI 2 de las Fiscalías Descentralizadas de Florencio Varela, encontraron siete puñaladas en el cuerpo de la joven. Confirmaron que habría sido asesinada antes de que el incendio se desatara como también haber recibido golpes en el cráneo.
En el caso, la autopsia fue fundamental para esclarecer las circunstancias de la muerte de Nara, quien falleció por un «shock hipovolémico y un hemotórax», tras perder sangre debido a las heridas de arma blanca. Las investigaciones también revelaron que la relación entre Nara y M.H. era marcada por la posesividad y la violencia. Testimonios de conocidos de la pareja señalaron la naturaleza tóxica del vínculo, lo que llevó a la fiscal a solicitar la detención del novio.
En consecuencia, M.H. fue arrestado cerca de su domicilio y ahora enfrenta cargos de “homicidio triplemente agravado, por mantener una relación de pareja, por violencia de género y por intentar ocultar su crimen al prender fuego la casa (lo que prevé una pena de prisión perpetua en caso de ser hallado penalmente resposnable)”, explicaron las fuentes.
