La Justicia de Quilmes debe decidir si el exlider de la barra del Quilmes Atlético Club, Ramiro Bustamante, que fue imputado en las últimas horas por lesiones a su pareja, sigue con prisión domiciliaria o vuelve a cumplir pena a una unidad del Servicio Penitenciario Bonaerense. Durante el fin de semana personal de la Comisaría 6° de Ezpeleta lo detuvo luego que fuese denunciado por agresiones de la joven. Ahora el juez Federico Merlini deberá expedirse acerca de la suerte procesal del reconocido hincha.
Personal de la Comisaría 6ª de Ezpeleta detuvo a Ramiro Bustamente, de 39 años de edad, por lesionar a su pareja cuando se encontraba gozando del beneficio de prisión domicliaria tras haber accedido al mismo ante el temor de la propagación de coronavirus en la unidad donde cumplía su pena.
Según el acta de procedimiento un móvil policial que realizaba la recorrida de la Cuadrícula 31 el viernes a las 23 se hizo presente en una finca de Ezpeleta, luego de un alerta del 911.
Frente a los oficiales de la Policía, una joven relató que Bustamante la agredió físicamente. El exlider de la hinchada del QAC había accedido al beneficio de prisión domiciliaria luego de diversas presentaciones de su abogado particular, Pablo Bonanatta.
En su testimonio la mujer indicó que llamó al 911 debido a la agresión. Agregó que luego de una discusión por un tema menor; éste le propinó varios golpes en la cara sin motivo alguno.
Los oficiales dijeron en el acta que a simple vista, la mujer presentaba marcas de golpes en los pómulos y manchas hemáticas. Bustamente se encuentra purgando pena por delitos de robo y en mayo del año pasado fue declarado “no culpable” bajo una acusación de “secuestro extorsivo” en un juicio por jurados celebrado en la sede de Penales de Quilmes.
Ahora el juez Merlini deberá decidir que temperamento adopta con relación a Bustamante, si se le revoca la prisión domiciliaria o sigue gozando del beneficio.