La burocracia es un denominador común en muchas ocasiones en la sociedad argentina. La justicia no es la excepción; desde hace casi un año el abogado que patrocinaba a José María Scrocchi; el vecino que mató a un hombre tras discutir en la cola de un hipermercado del centro de Quilmes no encuentra respuestas en una fiscalía de La Plata a la que reiteradamente, sin éxito, le ha solicitado el certificado de defunción de Scrocchi. Mientras tanto los restos del vecino están en la morgue de La Plata; Scrocchi murió tras estar alojado en la Unidad de Melchor Romero el 12 de octubre del año pasado.
El vecino quilmeño tomó protagonismo en los medios de comunicación cuando le quitó la vida a un inocente. José María Scrocchi le disparaba en enero de 2018 en varias ocasiones en un mediodía de domingo a Roberto Daniel Cavana, que luego de agonizar en el Hospital de Quilmes fallecía horas después.
Por los hechos Scrocchi, que según consta en el expediente, buscó un arma en su domicilio, regresó y atacó a su víctima; había sido alojado en la Unidad 34 de Melchor Romero, finalmente moría el 12 de octubre del año pasado tras padecer un “shock séptico”. El fallecido tenía que ir a juicio bajo los cargos de “homicidio en concurso real con portación ilegal de arma de guerra”; la causa es del Tribunal Oral Criminal N° 2 de Quilmes; el abogado Gustavo Trimarchi pidió sin éxito el certificado de defunción del vecino a la UFI 5 de La Plata pero hasta el momento no ha tenido respuestas. “Se extingue la acción penal por el fallecimiento de Scrocchi, solo hemos tenido respuestas favorables en el TOC 2 de Quilmes; ese certificado es la prueba documental necesaria”, dijo a Data Judicial el doctor Trimarchi.
La demora es tal que el Oral N° 2 de Quilmes a requerimiento del letrado remitió copias del oficio solicitando la documental Fiscalía General de La Plata y a la Procuración de la Suprema Corte de Justicia.
Un inocente
El dolor de la familia Cavana es irreparable, ya que la muerte de un inocente queda impune, ese domingo de enero de 2018; Roberto Daniel Cavana había ido a comprar al hipermecado Carrefour de Lavalle y Humberto Primo sin saber que luego de un intercambio de palabras en la cola del centro comercial, el fallecido Scrocchi iría a su casa, tomaría un arma y le efectuara disparos mortales. Un lamentable suceso que no encontrará ni siquiera reparo en la Justicia.