Los médicos forenses confirmaron que el empresario Jorge Neuss asesinó en el country Martindale de Pilar a su esposa Silvia Saravia de un único disparo en la cabeza luego de un forcejeo que dejó signos de defensa en la mujer y un roce de bala en una mano del propio autor del femicidio.
Así se desprende de los primeros resultados de las autopsias realizadas ayer por la madrugada en la morgue que funciona en el Hospital de San Fernando y de acuerdo con lo que los peritos le adelantaron a la fiscal de la causa, María José Basiglio, todo indica que se trató de un femicidio seguido de suicidio.
“Está prácticamente descartada la hipótesis de un pacto suicida. Las autopsias y lo que se vio en la escena nos hacen pensar en que Neuss sorprendió a su mujer cuando ella fue al baño, luchó, la dominó tomándola del cabello, la asesinó y luego se disparó en la cabeza”, confiaron fuentes judiciales.
En el caso de Saravia (69), los médicos corroboraron que el disparo ingresó por la región posterior lateral derecha del cráneo (por detrás y arriba de la oreja), salió por detrás de la oreja izquierda, volvió a ingresar al cuerpo por el hombro izquierdo y el proyectil quedó alojado en el brazo, de donde fue extraído con una gran deformación. El disparo provino de un el revólver calibre .357 Magnum apoyado y Saravia tenía la cabeza reclinada sobre su hombro izquierdo cuando recibió el tiro.
Además, las pesquisas derivaron en una serie de indicios que refuerzan la hipótesis de que la mujer fue sorprendida cuando se encontraba en el baño. “Tenía algunos hematomas y signos de defensa en las manos y los antebrazos”, agregó uno de los investigadores que detalló que la data de muerte de Saravia se estimó entre las 11.30 y las 12 de ayer.
Respecto a Neuss (73), quien murió a las 14.20 en el Hospital Austral de Pilar, los peritos precisaron que se pegó el tiro en el vestidor-antesala del baño en suite, mirando hacia su mujer ya asesinada.