Los obispos de Quilmes, Carlos José Tissera y Marcelo Julián Margni, visitaron el miércoles las instalaciones de la Unidad 31 de Florencio Varela luego del motín desatado el fin de semana pasado.
Tissera y Margni estuvieron acompañados por el capellán general Carlos Pont Gasques, y el capellán Rubén Infantino. Fueron recibidos por el Jefe de Complejo Penitenciario, inspector mayor Javier Díaz, y el director de la Unidad, prefecto mayor Oscar Saravia.
En la visita, los padres Obispos recorrieron gran parte del edificio, el pabellón 11 y el Centro Universitario que quedó totalmente destrozado tras un voraz incendio. El pabellón 3, recientemente inaugurado como literario, y otros, en los que pudieron conversar con los privados de la libertad y recibir sus peticiones.
Antes de retirarse, también hicieron una oración junto al personal para que se restablezca la calma y la paz. Y pidieron por la pronta recuperación de los heridos y, en especial, por la salud de un preso que se hallaba internado por lesiones en la cabeza producto de los enfrentamientos.