Especialistas del Equipo Argentino de Antropología Forense revelaron que hay más de un centenar de cuerpos enterrados como NN que no se pudo identificar, en el marco del juicio en La Plata por delitos cometidos en tres centros clandestinos de detención durante la última dictadura, por lo que pidieron a personas que buscan familiares desaparecidos de esa época que concurran a extraerse muestras de sangre.
“Aún quedan numerosos restos por identificar en el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), de los cuales hemos obtenido su perfil genético con lo cual hacen falta que se acerquen familiares”, explicó Sofía Egaña del mencionado equipo forense.
La especialista declaró ante el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, que desde el 27 de octubre juzga a 18 represores, entre ellos Miguel Etchecolatz, por los secuestros, torturas, crímenes y abusos sexuales cometidos contra casi 500 víctimas alojadas en tres centros clandestinos de detención durante la última dictadura militar.
Los centros funcionaron en dependencias de la Policía Bonaerense: el Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes y el que funcionó en la Brigada de Lanús y fue conocido como “El Infierno”. Egaña relató al Tribunal cómo fue la identificación de las víctimas de este juicio: Mario Mercader, Miguel Ángel Soria, Liliana Ross de Rosetti, Alicia Risso, Héctor Pérez, José Rizzo, hallados en fosas comunes de los cementerios de San Martín y Lomas de Zamora.
En ese marco, y tras detallar la dificultosa identificación debido a que se trataba de esqueletos arrojados en fosas comunes y luego exhumados sin método de preservación, Egaña contó que aún resta identificar a un centenar de cuerpos NN hallados en esas tumbas. “Hace falta que se acerquen familiares”, insistió Egaña y explicó que “el familiar puede llamar a la línea 0800 345 3236 o las líneas directas donde van a ser atendidos y orientados sobre el procedimiento de toma, que es muy sencillo, una gota de sangre puede llevar a identificarlos, es un pinchazo muy pequeño en la yema de los dedos”.
Egaña remarcó que se extraerá el ADN de esa gota de sangre “y se lo comparará con todos los perfiles genéticos de NN que aún restan identificar”. Precisó que si bien la sede del EAAF está en la Ciudad de Buenos Aires “pueden comunicarse por teléfono personas de cualquier zona del país, no es necesario que se acerque a la sede, se los orientará sobre cómo proceder, no importa en qué pueblo o ciudad esté”.
Patricia Bernardi, también integrante del EAAF, al declarar en este juicio refirió que había “más de 150 cuerpos sin identificar en el Cementerio de Avellaneda”. La especialista detalló además que en el Panteón Policial de esa necrópolis “hay debajo cuerpos humanos enterrados, pero para poder avanzar en esa parte que es lindante al sector 134, habría que demolerlo”.