La Corte Suprema de Justicia de la Nación rechazó el último intento de la defensa de Rodrigo Emidio Chaparro, uno de los cinco exjefes del Servicio Penitenciario Bonaerense condenados a prisión perpetua por la muerte de Patricio Jonathan Barros Cisneros, ocurrida en 2012 en la Unidad 46 de San Martín.
Con esta decisión, la condena quedó firme, en un caso emblemático de violencia institucional y encubrimiento en cárceles bonaerenses.
Barros Cisneros, de 26 años, fue asesinado a golpes, esposado y frente a otros internos, tras discutir con agentes penitenciarios al pedir un espacio privado para ver a su pareja embarazada.
El personal intentó encubrir el hecho simulando un suicidio. La investigación reveló que tres detenidos fueron forzados a firmar un parte falso, pero luego denunciaron lo ocurrido al ser trasladados.
En 2015, cinco jefes fueron condenados: Gallego, Aníbal, Luna, Liberto y Chaparro. Las instancias superiores ratificaron el fallo, y ahora la Corte Suprema, con los votos de Rosatti, Rosenkrantz y Lorenzetti, desestimó el recurso extraordinario por inadmisible, según el artículo 280 del Código Procesal.
Lorenzetti aclaró que este rechazo no implica avalar el fallo, sino que el caso no reunía las condiciones para ser tratado. Además, el tribunal intimó a la defensa a justificar el beneficio de litigar sin gastos o realizar un depósito, bajo apercibimiento de ejecución.
Con esta decisión, se cierra el camino judicial y se reafirma la condena en un caso que puso en evidencia la violencia y complicidad dentro del sistema carcelario.
