Un grupo de vecinos que vive en un predio ubicado en Lomas de Zamora y La Matanza, fue hostigado para que abandone el lugar y Gendarmería destruyó 11 casas. Las 232 familias que viven en el terreno compraron los lotes en el marco de una estafa y hace un mes se enteraron que la tierras en realidad pertenecen al Estado.
En diálogo con DiarioConurbano.com, Carlos Pousa Bogado, abogado de las familias, manifestó: “Están siendo reprimidos, les están destruyendo las casas que compraron y construyeron con su esfuerzo. No hubo una notificación legal de desalojo. Tendrían que haber dado un compás de espera y a partir de ahí con la presencia de algún político negociar una salida lógica pacífica y razonable”.
El predio esta en el Camino de la Ribera y el Arroyo Mugica, en Ingeniero Budge, y comenzó a venderse en 2014 con la posibilidad de pagarlo en cuotas. Los falsos propietarios les dijeron a los vecinos que habían ganado el terreno a través de una usucapión y así iniciaron la estafa.
Las familias hace un mes se enteraron de que los vendedores no eran los propietarios luego de que el Mercado Central inició una denuncia por usurpación. El terreno pertenece a Nación y se planeaba concretar una planta potabilizadora de agua para la zona.
En este sentido, Bogado explicó que “son personas trabajadoras, con poca educación” y “el marco jurídico no le permite al juez realizarlo de esta manera”. “Les están rompiendo todo con los vecinos ahí y con el déficit de viviendas que hay tiran abajo casas. Estas familias son víctimas de una estafa, ¿que se supone que van a hacer?”, aseveró el abogado.
El lunes último acudió el juez federal Federico Villena con Gendarmería para hacerlos firmar un consentimiento con el fin de que se fueran del lugar. Sin embargo, las familias advirtieron que no tenían a donde irse y les mostraron sus boletos de compra venta.
En este contexto, en el día de hoy se realizó un procedimiento por un oficio que sacó el juzgado federal, para que Gendarmería destruyera estructuras que no estuvieran habitadas. Durante la mañana de hoy llegaron con topadoras y tiraron abajo 11 viviendas, algunas de hasta tres pisos listas para ser usadas.
“El juez les dijo que les iban a dar otro lugar pero un juez no tiene potestad para asegurar eso. Primero habría que determinar si hay una usurpación porque mis clientes no usurparon. Están rompiendo propiedades”, aseguró el particular damnificado. Según lo relatado, Bogado denunciará la estafa y al juez federal por actuar con una “total parcialidad”. Esta mañana detuvieron a cinco personas y el cónsul de Bolivia se hizo presente en el lugar a pesar de que no lo dejaron ingresar.