Lucas González, el futbolista de 17 años de las inferiores de Barracas Central que fue baleado en la cabeza por un efectivo de la Policía de la Ciudad, murió en el Hospital El Cruce, de Florencio Varela, donde se encontraba internado desde ayer por la madrugada.
“Mataron a mi sobrino. Queremos pedir Justicia por Lucas. Lucas va a seguir en nuestros corazones y en los corazones de mucha gente”, dijo Emanuel, tío del futbolista, en la puerta del centro asistencial.
Asimismo en un comunicado, el Ministerio de Justicia y Seguridad porteño, a través de la Oficina de Transparencia y Control Externo, confirmó que los tres efectivos fueron pasados a disponibilidad preventiva, hasta tanto determine la Justicia sus responsabilidades.
“Mediante esta medida se los desafecto de la función operativa y se los paso a disponibilidad. Ahora esperamos que es lo que determinará la Justicia”, dice el comunicado.
Según el comunicado, la Oficina de Transparencia y Control Externo es un órgano desconcentrado del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, integrada en su totalidad por personal civil.
“Tiene como funciones: Investigar las situaciones en las que intervenga personal de la Policía de la Ciudad y en las que se denuncie o presuma la existencia de irregularidades; sustanciar sumarios administrativos; y proponer al Ministro de Justicia y Seguridad, cuando corresponda, las sanciones disciplinarias a aplicar”, explicó el ministerio.