El Hospital de Quilmes, y todos los centros del Conurbano, volvieron a llenarse de gente; las unidades febriles de urgencia de los hospitales, también. Este 24 de diciembre el Hospital ya no realiza testeos.
En algunos casos, en distintos puestos de testeo, las filas eran de hasta dos o tres cuadras, con varias horas de espera.
Según reiteran desde la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica, Roberto Debbag, se refuerza que los protocolos para los contactos estrechos no se modificaron.
“Desde la circulación de las variantes delta y ómicron, responsables de esta aceleración de los casos, los requerimientos de testeos y las altas epidemiológicas son los mismos. Si alguien estuvo más de 15 minutos, sin distancia social y sin barbijo, es contacto estrecho y no hay demasiada vuelta que darle al asunto –sostiene el médico–. Deberíamos ser más rigurosos que nunca en este sentido, sobre todo en esta época del año y para que los contagios no sigan aumentando”.