Finalmente, tras el escándalo con la jueza Julieta Makintach y su posterior recusación, ayer se declaró nulo el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona. La decisión fue tomada por los magistrados Maximiliano Savarino y Verónica Di Tommaso, quienes quedaron a cargo del tribunal tras el apartamiento de Makintach.
Cabe recordar que durante más de dos meses de debate, declararon más de 40 testigos y, en las últimas horas, la resolución fue escuchada por los familiares de Maradona y también, por los siete imputados. Con esta definición, el debate será retomado desde cero.
En el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) número 3 de San Isidro, Di Tommaso argumentó que “los fiscales han sido muy ordenados para producir prueba”, y sobre la jueza del escándalo, sugirió: “Quién hoy no se encuentra en el estrado no tenía las mismas intenciones que nosotros”. “Hubo una persona que se equivocó y pagó. Y está pagando. Y seguramente va a tener que seguir dando explicaciones”, resaltó.

Por su parte, mencionó que no es la justicia quien deba pagar: “La justicia no se mancha. Desde el día en que nos tocó intervenir, con las particularidades que tenía este juicio, estuvimos a la altura de las circunstancias. Pero nos toca ser parte de un sistema que defendemos a diario. Una persona que se equivoca no significa que sea toda la justicia. A cada uno le llega la justicia que merece”, cerró.
Savarino, en tanto, culpó a la magistrada Makintach por la nulidad del juicio al señalar que es “la única responsable” y aseguró que el proceso judicial “no corresponde que se reanude” en el mismo tribunal. “Los suscriptos no podemos asumir nuevamente el debate porque escuchamos a 40 testigos y una imputada”, señaló. Con todo esto, el proceso judicial vuelve a foja cero, es decir, que las audiencias hechas hasta el momento deben volver a realizarse.