Horacio Conzi, el exempresario gastronómico que en 2003 asesinó al joven Marcos Schenone en Béccar y hace tres semanas volvió a la cárcel luego de violar su prisión domiciliaria, presentó un “habeas corpus” para ser liberado, pero la Justicia rechazó su planteo y por el momento continuará detenido.
Luego de que el 30 de julio pasado, la jueza de Ejecución Penal 2 de San Isidro, Victoria Elías García Maañón, ordenara revocarle el beneficio de la prisión domiciliaria y enviarlo de nuevo a prisión para cumplir su condena de 24 años y 9 meses de cárcel, la defensora oficial Patricia Colombo presentó un pedido de “habeas corpus”. En el mismo, argumentó que no podían revocarle la domiciliaria porque la enfermedad cardíaca por la cual se le habían dado, subsistía.
La jueza García Maañón rechazó el planteo defensista al fundamentar que el incidente de la prisión domiciliaria no era un tema de “habeas corpus” y que la detención fue legítima y emanada por un juez competente.
Ante la decisión de la jueza, la defensa de Conzi apeló el rechazo del “habeas corpus” ante la Sala I de la Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro, cuyos jueces ya tenían para analizar la apelación que la misma Colombo realizó sobre el fallo que revocó la prisión domiciliaria.
Ese día, sonó la alarma del monitoreo electrónico del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), por lo que personal policial se trasladó hasta el domicilio, donde el propio condenado le explicó a los efectivos que había salido de la casa por unos momentos para ayudar a su hermano Hugo a empujarle el auto que no le arrancaba, porque tenía que llegar al cementerio a dejarle flores a su madre fallecida en un nuevo aniversario.
“No resulta creíble desde ningún punto de vista, tan siquiera desde lo humanitario (…) que el aquí condenado, poniendo en riesgo la vigencia del instituto otorgado y con un padecimiento cardíaco, salga a empujar un vehículo por un lapso de 12 minutos”, señaló la jueza García Maañón en el fallo que lo envió otras vez a prisión.
En la misma resolución, la magistrada destacó que además de este episodio, Conzi rompió en una oportunidad la tobillera porque decía que le ajustaba y tuvo otras “seis salidas de rango de no más de cinco minutos” desde el 13 de abril que le otorgaron este beneficio.
La familia Schenone cuestionó el hecho de que Conzi haya vuelto a su casa y lo acusó de burlarse de la Justicia cuando por Facebook publicó que estaba “1000% saludable” o cuando su hermano Hugo subió a redes sociales un video donde se lo veía al condenado fuera de su casa, paseando en la vereda a “Franco y Sara”, las dos cabras que tienen como mascotas.
El ex empresario -ahora convertido en vegano- fue condenado a 24 años y 9 meses de prisión por haber asesinado el 16 de enero de 2003 a Schenone (23), cuando persiguió y efectuó 14 disparos contra el remís en el que viajaba por la avenida del Libertador, a la altura de Béccar.
Para la Justicia, Conzi cometió el hecho luego de haber tenido un ataque de celos cuando vio dentro de su restaurante “Dallas-Las Olas Boulevard” que el joven se besaba con Paula Alonso, una chica a la que él había intentado conquistar.
Fuente: Crónica