Efectivos de la Policía Local de La Plata atraparon en las últimas horas al penúltimo de los once detenidos, que el pasado 6 de noviembre protagonizaron una cinematográfica fuga de la Comisaría Tercera de Quilmes, donde estaban alojados.
Los uniformados lo recapturaron en la noche del martes en la calle 71 entre 1 y 2 de la capital bonaerense, a pocos metros del Hospital San Martín. El prófugo, de 47 años, se encontraba junto a otro sujeto intentando forzar la cerradura de un coche estacionado en la vía pública.
Tras identificarlos, la Policía comprobó que uno de ellos tenía pedido de captura por “evasión”, por lo que lo trasladaron a la Comisaría Novena de La Plata, quedando a disposición de la Fiscalía Nº 1 de dicha ciudad. Cabe destacar que con él ya son 10 los prófugos recapturados y que sólo resta uno, que estaba imputado por “robo agravado por el uso de arma de fuego en poblado y en banda”.
Cabe recordar que, según se informó oficialmente, en los calabozos donde deberían haber 12 personas alojadas, había 52. Ese miércoles en horas del mediodía, un joven oficial de 23 años abrió con la llave la puerta de los calabozos para entregar la comida, en una maniobra habitual. Pero cuando estaba adentro fue sorprendido por los detenidos, que lo empujaron y 11 de ellos salieron corriendo.
El policía cerró la puerta con llave, impidiendo que los demás los imitaran. Sin embargo, del lado de afuera debía estar otro oficial -de 23 años- encargado de cerrar la puerta cuando su compañero entraba al calabozo, pero en esta oportunidad se demoró porque justo otro policía le habló, de manera que no estaba en el lugar preciso cuando debía realizar dicho procedimiento.
Y sumando casualidades, en ese horario preciso el portón de la calle se encontraba sin llave. Un oficial de 27 años, al ver profugarse a los detenidos, salió corriendo tras ellos por avenida 12 de Octubre. Vio a varios de ellos subirse al Renault Megane, al que le disparó una vez con su arma reglamentaria.
A lo largo de este tiempo, uno a uno fueron cayendo nuevamente en manos de las autoridades judiciales y policiales. Al primero lo habían atrapado en jurisdicción de la Comisaría Quinta del barrio La Cañada, mientras que al segundo lo acorralaron en la Ribera de Quilmes.
A otro habían ido a buscarlo en su casa del barrio Iapi, pero allí sorprendieron a su madre presuntamente vendiendo drogas. Horas después su hijo fue también arrestado. Otros dos cayeron en allanamientos realizados en la Villa Itatí de Bernal y en la villa El Monte. Al menos tres se entregaron por sus propios medios en los Tribunales Penales de Quilmes, en la DDI de la ciudad y en una dependencia de la ciudad bonaerense de Marcos Paz.