La Justicia indagó ayer al detenido acusado de haber matado a su pareja a mazazos en Villa Luján en Quilmes Este. Data Judicial pudo saber que Beatriz Espinoza tenía 22 golpes propinados con la maza en su cuerpo y signos que evidencian que hubo mecanismos de defensa previo a su deceso; el imputado se negó a declarar ante la fiscal Ximena Santoro, de la UFI N° 7.
Tal como dimos cuenta en la víspera la fallecida que tenía 37 años sufrió un ataque mortal de parte de su femicida el mediodía del domingo en inmediaciones de Mozart y Guiraldes. En el lugar al llegar la policía estaba la pareja de la mujer, quien al ser entrevistado por los agentes policiales confesó haberla golpeado con una maza, aunque dijo que fue en defensa propia.

Más allá de esto ayer no declaró en sede judicial asistido por defensa técnica. “Sobre la cama del dormitorio se encontró un cuchillo y manchas hemáticas en las sábanas, observando también una maza tirada en el piso”, indicaron fuentes del caso.
De acuerdo con el relato del detenido ante la policía, en ocasión de la llegada a la escena del crimen la mujer habría llegado a la casa portando un arma blanca y, tras una discusión, habría intentado apuñalarlo. Fue entonces, según afirmó Sosa, que él tomó una maza que se encontraba en el lugar y la golpeó en la cabeza y en el cuerpo.
La fallecida tenía en sus manos partes del cabello de Sosa, lo que presume indicios de acciones de defensa en medio de los mortales golpes de maza que recibió y que derivaron en su deceso.