Con los relatos de los testigos citados se desarrolló ayer la audiencia de pruebas en el caso que se sigue a Lautaro Báez y Cristian Amarilla; acusados del homicidio de un vecino de Solano, Facundo Molina en 2019. Ayer se ofrecieron los testimonios de la fiscalía como la defensa y hoy se especula declararán los imputados para luego dar lugar a los alegatos y deliberaciones de los jurados para arribar a un veredicto de culpabilidad o no culpabilidad.
En los relatos quedó evidenciado que la víctima, Facundo Molina, cometía robos en la zona como en la feria de Solano y luego ofrecía los productos a vecinos. Fue así que sustrajo un estéreo a un familiar de Amarilla, lo que derivó en un malestar entre el imputado y el fallecido.
Varios de los declarantes refirieron a Molina como un joven que cometía ilícitos y uno de los comparecientes al referirse a los encartados Amarilla como Báez precisó que “se habían equivocado” aunque no profundizó a consultas del fiscal Claudio Pelayo. La misma esposa de Molina reconoció que su marido robaba y tenía “problemas de adicciones”, en uno de los primeros testimonios de la jornada.
Luego varios de los convocados refirieron a los procesados como jóvenes de trabajo con un buen concepto en el barrio de Solano; a Molina le dispararon en la cabeza y producto de dichas lesiones murió tras estar internado en el Hospital de Quilmes; los hechos se dieron el 18 de septiembre de 2019 alrededor de las 23.30 en la 831 y 897.
“Sacaba música de los autos”
Un sobrino de Molina recordó que a 100 metros vio como Amarilla era el que descendía de un auto y lo golpeaba a su tío y que de repente “se escuchó una detonación”.
Con relación al concepto del fallecido, el declarante indicó que “agarraba cosas de la feria y después las vendía, tenía algunos errores, en algunas oportunidades le sacaba música a los autos (en referencia a la sustracción de estéreos)”, respondió a consultas de los defensores Celeste y Guillermo Baqué como Luis María Giordano.
La jueza Andrea Calaza brindará hoy instrucciones a los jurados y se prevé que se den los alegatos como el veredicto del jurado popular.