Las personas que estén imputadas en causas por tráfico de drogas, contrabando o lavado de dinero, entre otros delitos complejos, no podrán obtener licencias de taxis ni de remises en la ciudad de Rosario, según una ordenanza aprobada por “unanimidad” en el Concejo Comunal local. La ordenanza fue sancionada anoche por iniciativa del edil Roy López Molina, quien consideró que “la norma intenta endurecer los requisitos vigentes y así evitar que el crimen organizado lave dinero a través de un servicio público”.
La ordenanza dispone que si los titulares de licencias de taxis o remises fuesen imputados penalmente por el delito de lavado de activos, tráfico o comercialización ilícita de estupefacientes, contrabando de armas o de estupefacientes, entre otras, contempladas en la ley 27.401, la autoridad de aplicación procederá a “suspender” el uso de la licencia de taxis o remises.
Añade que también podrá, “caucionarla” por el plazo de duración del proceso penal, hasta la “caducidad definitiva” en caso de una condena firme.
Sobre el origen de la iniciativa, López Molina, indicó a Télam que la idea “surgió tras el caso del jefe de la barra brava de Rosario Central, Andrés Bracamonte, alias ‘Pillín’ (49)”, quien cumple desde junio pasado prisión preventiva en el marco de una causa por lavado de activos. El barra fue acusado por el fiscal del caso, Miguel Moreno, de haber lavado al menos 38 millones de pesos a través de testaferros y sociedades propias en los últimos 10 años.