Los obispos de Quilmes Carlos José Tissera y Eduardo Gonzalo Redondo invitaron a la comunidad a la misa para despedir al Papa Francisco que tendrá lugar en la Catedral de Quilmes, mañana, con una conmovedora carta.
Los obispos quilmeños iniciaron su misiva señalado que “el lunes 21 de abril, octava de Pascua, sorprendió al mundo y a cada uno de nosotros la partida de nuestro querido Hermano Mayor, el Papa Francisco. Nuestra humanidad llora y esta realidad se nos vuelve consciente muy lentamente. Sin embargo, su vida, centrada en la buena noticia de Jesús, comprometida al servicio de ‘todos, todos, todos’, partiendo desde los pobres y vulnerables, nos impulsa a no perder la esperanza ni declinar la alegría del evangelio siendo conscientes de que el sentido de la vida está en donarla sin guardarnos nada”.

“Hasta el último momento de su vida, Francisco, en la fragilidad de su estado de salud, entregó su vida con sus palabras y su presencia concreta el último domingo de pascua recorriendo la plaza de San Pedro. Francisco, enfermo, frágil y vulnerable nos regaló el anuncio de la resurrección: ¡Cristo vive y te quiere vivo! Nos regaló la gracia de vivir la fe con el corazón el cielo y los pies en la tierra”.
“Con la certeza de que en su corazón la luz de la resurrección es el cumplimiento de la promesa hacemos nuestras sus palabras: ´El Señor nos dice que estemos preparados para el encuentro, la muerte es un encuentro: es Él quien viene a encontrarnos, es Él quien viene a tomarnos de la mano y llevarnos con él. ¡No quisiera que esto sea un aviso de funeral! Es simplemente el Evangelio, es simplemente la vida, simplemente decirse el uno al otro: todos somos vulnerables y todos tenemos una puerta a la que el Señor llamará algún día´”.
“En este espíritu nos encontraremos para celebrar la vida de Francisco en nuestra Catedral de Quilmes el próximo sábado 26 de abril a las 19, día de sus exequias. Muchos de ustedes lo harán igualmente en sus propias comunidades”, finalizaron su invitación los obispos Tissera y Redondo.