Dos ONGs denunciaron que en Argentina existen más de 80 mil automóviles “mellizos” circulando en las calles de las distintas provincias. Además, señaló que el 80% de los mismos son camionetas utilitarias, 4×4 y Pick Ups, grandes y medianas.
Se trata de la las ONG´s Defendamos Buenos Aires y Defendamos la República Argentina. Son lideradas por el abogado Javier Miglino, quien afirmó que esta modalidad de estafa “crece cada vez más y que, a pesar de los recaudos, tiene detrás una operatoria sofisticada”.
También, señaló que los delincuentes detrás de las operaciones realizan las ventas a través de publicitarias como Marketplace de Facebook y avisos en OLX.

De esta manera, las víctimas que buscan comprar un vehículo usado, caen en la trampa tras encontrar un rodado en buen estado y precio accesible. Por tal motivo, se arriesgan a pagar primero y revisar después. “En el momento en que se acercan al Registro de la Propiedad Automotor surgen las anomalías y todo se viene abajo porque el auto comprado no era tal, se trata de un auto robado con papeles falsificados, desde título de propiedad y cédula verde a constancias de seguros, patentes, verificación técnica policial, etc.”, indicó el abogado.
Además, el letrado precisó que detrás de este tipo de estafa tiene detrás a dos bandas delictivas: ”Una que se encarga del robo del auto a mano armada y otra que se encarga de confeccionar e imprimir la documentación falsa que va a acompañar la venta; incluyendo a los vendedores que son estafadores experimentados”.
Modus operandi
Los robos se realizan en grupo, donde los delincuentes amenazan con armas de fuego al propietario de un rodado mientras está arriba del rodado. “La idea es llevarlo con la llave puesta, sin alarmas y sin rastreadores satelitales activados. Después los autos se ´enfrían´, le cambian la patente y los dejan estacionados en playas de estacionamiento o en la calle para asegurarse de que no está en la mira policial”, detalló Miglino.
También, indicó que el término se acuña al método debido a que la práctica consiste de disfrazar un auto robado con pedido de captura con otra patente perteneciente a un rodado de igual título automotor y cedula verde, para que sea más difícil su detección.
“El Artículo 292 del Código Penal señala: ‘El que hiciere en todo o en parte un documento falso o adultere uno verdadero, de modo que pueda resultar en perjuicio… Si el documento falsificado fuere de los destinados a acreditar la identidad de las personas o la titularidad del dominio o habilitación para circular de vehículos automotores, la pena será de tres a ocho años’. Es decir que usar un auto mellizo expone a esa pena, tal como delito federal”, citó el letrado.
Y añadió: “Por eso si lamentablemente se da el caso de haber comprado un vehículo ´mellizo´ hay que hacer dos cosas: primero consultar con un abogado y luego hacer la denuncia en la fiscalía de turno, poniendo el vehículo a disposición judicial. Solo de ese modo las cosas podrán solucionarse”.
