Carlos Alberto Rodríguez Alvarado, era un joven de 19 años de nacionalidad boliviana, lo mataron a puñaladas en el abdomen años atrás para robarle el celular en Ezpeleta: “el desprecio por la vida es alarmante” fueron las palabras del fiscal Claudio Pelayo al reclamar que se condene a prisión perpetua a los imputados en el caso Damián Chavez y Horacio Ramos; el funcionario público reclamó a los jueces del Tribunal Oral 4 de Quilmes que se aplique el máximo de pena. Por su parte, la defensa de los encartados solicitó la libre absolución o en su defecto que se condene a Ramos por un segundo hecho de encubrimiento en otro hecho de robo y en caso de veredicto condenatorio requirió la inconstitucionalidad del pronunciamiento.
Para Pelayo quedó acreditada la responsabilidad penal de los procesados por los hechos que se le enrostran y refirió a elementos que se dieron en las audiencias del juicio a lo largo de varias semanas. Tal consta en la causa los hechos se dieron en enero de 2023 en inmediaciones de Venezuela bis, entre Carrillo y avenida La Plata. La víctima yacía tendido en el suelo con heridas de arma blanca. Momentos después, una ambulancia del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME) trasladaba a Carlos Alberto Rodríguez Alvarado al hospital de Quilmes donde murió después.
Para el fiscal el fallecido se dirigía caminando desde la casa de un amigo hacia el domicilio de su padre cuando lo interceptaron dos delincuentes que le robaron el celular y, tras ello, lo apuñalaron en reiteradas oportunidades para luego darse a la fuga: “el desprecio por la vida es alarmante” fueron las calificaciones del acusador para pedir a los magistrados que se condene a Ramos y Chavéz a prisión perpetua por “homicidio criminis causae”, es decir que perpetraron el robo y mataron a Rodríguez Alvarado para alcanzar impunidad.


La defensa
A su turno, la defensora oficial, Irma De la Fuente, reclamó que sean absueltos por los hechos “ya que no se alcanzó certeza positiva para arribar a una pronunciamiento de condena; además el fin de la pena es resocializar y la perpetuidad sería una algo gravísimo para mis asistidos”. La funcionaria cuestionó elementos de la instrucción del proceso como animosidad y parcialidad de algunos de los testigos citados a prestar declaración.
Finalmente como a ambos se los acusa de otro hecho de robo pidió que en caso de veredicto de condena, se le aplique a Ramos la misma por los delitos de encubrimiento.
Los jueces Alberto Ojeda, Andrea Calaza y Pablo Pérez Marcote (subrogante) darán a conocer la semana próxima el fallo al que han arribado.