Entre el 21 y 24 de septiembre se llevó a cabo la audiencia pública sobre la prolongación de la Autopista Buenos Aires – La Plata hasta el empalme con la RP Nº 11. El proyecto fue criticado por asociaciones ambientalistas que ven en ella un “impacto negativo” sobre parques y humedales.
Según indicaron desde el “Foro en defensa del Río de la Plata, la salud y el medio ambiente”, de realizarse dicha obra se verían afectados el Parque Martín Rodríguez de Ensenada y los humedales Maldonado de Berisso, sobre toda la región ribereña del Río de la Plata, incluidas las islas Paulino y Santiago y el delta del río Santiago.
En referencia a la obra, desde el Foro afirmaron que se presentó “un solo proyecto ya aprobado y listo para ser ejecutado, que data del 2014. Se presentó un proyecto viejo e insuficiente, sin tener en cuenta las cuestiones ambientales, sociales y sanitarias, particularmente surgidas en el último tiempo”.
“No hay informes físicos y químicos sobre el impacto que se producirían con la remoción de los suelos. La obra está afectando a una riquísima e irrecuperable biodiversidad de enorme importancia para el ambiente y la salud de los habitantes de la región”, aseveraron. Además, indicaron que algunas de las zonas por donde va a pasar el trazado de la Autopista “tenían protección por ser áreas naturales y que se las modificó recurriendo a conceptos como que los intendentes tienen los votos y representan a la mayoría de la población”.