La Cámara de Apelación y Garantías de Quilmes resolvió ayer revocar la prisión preventiva contra Gonzalo Andrés López, único detenido por “encubrimiento” en el marco del doble crimen de Paloma Gallardo (16) y Josué Salvatierra (14), los adolescentes asesinados en un descampado de Florencio Varela. La decisión fue de la Sala I con los pronunciamientos de los camaristas Mario Caputo y Patricia Patanella.
López, un comerciante de Río Negro, está imputado encubrimiento agravado. Su celular Samsung A02 comparte número de IMEI, marca y modelo con el del adolescente asesinado. Las pruebas que hay en el expediente indican que son teléfonos clonados.
El fiscal Darío Provisionato sostenía una hipótesis -que avaló juez de Garantías de Florencio Varela, Adrián Marcelo Villagra- para mantener tras las rejas al sospechoso: alguien llevó el dispositivo de Josué a Río Negro después de que los mataran. Ahora la Sala I echó por tierra la versión, al entender que ese escenario es imposible porque el IMEI estuvo activo al mismo tiempo en la Patagonia y en Florencio Varela entre el 17 y el 19 de noviembre, más de dos meses antes de los asesinatos.
A López lo detuvieron el 17 de febrero pasado en la ciudad rionegrina de General Roca. La Policía Federal Argentina (PFA) lo fue a buscar tras detectar que el IMEI del celular de Josué se volvió a activar allí por primera vez desde su asesinato. Lo usó entre el 10 y el 14 de ese mes -con un chip distinto al de la víctima- y después lo apagó.
Un estudio de la empresa Telecom confirmó la sospecha de que los números de IMEI estaban clonados. Además, se supo que el original era el de López, y el duplicado el del chico Salvatierra.
En su declaración, el detenido aseguró haber adquirido su Samsung A02 -de carcaza azul- en abril o mayo de 2024. Afirmó que era usado y que se lo compró a un desconocido por Facebook. El de Josué, en tanto, era de color negro.
La investigación alrededor del Samsung A02 está nutrida de otras sospechas tan sugerentes como inconexas, al menos hasta ahora. Los hilos que unen a Río Negro con Florencio Varela sugieren que en la Patagonia se esconde información relevante que podría esclarecer quién mató a los novios, un misterio que por ahora está lejos de resolverse.
Casi un mes después del hallazgo de los cuerpos en un descampado, por ejemplo, se descubrió que Omar Gallardo, padre de Paloma, tiene otra hija y una exesposa que viven en General Roca, la misma ciudad en la que estaba el celular clonado. En la víspera con las firmas de los magistrados Patanella y Caputo se ordenó liberar al oriundo de la patagonia argentina.
