Esta semana se realizaron allanamientos en los partidos de La Matanza, Monte Grande, Junín y en la ciudad de Resistencia, provincia de Chaco, en el marco de una denuncia por una defraudación en perjuicio de una empresa quilmeña. La presentación llevada a cabo en la UFI 1 de Quilmes -especializada en delitos de estafa, extorsión y defraudaciones informáticas en entornos digitales, a cargo del doctor Ariel Rivas y ayudante fiscal doctor Leandro Montejo- trepa al monto de 216 millones de pesos. La estafa afecta a una pyme que opera dentro del Parque Industrial de Quilmes sito sobre la avenida Camino General Belgrano.
La causa se inició por una denuncia realizada por la apoderada de una Pyme de Quilmes, quien se presentó ante la fiscalía y denunció que a fines del año pasado “en momento que ingresa al home banking de su entidad bancaria, coloca sus credenciales para realizar transferencias, cuando de inmediato nota que la pantalla del banco se encontraba con un cartel que decía que se encontraba en actualización de certificados; como la página no respondía la denunciante siguió con otras tareas; luego de unos minutos accedió nuevamente al home banking notando que se habían realizado doce transferencias hacia personas desconocidas por un total de $ 216.000.000,00″; consta en la investigación judicial.
Avanzada la investigación desde la fiscalía a cargo del doctor Rivas se ha logrado recuperar la suma de 52 millones de pesos; sin embargo la compleja operatoria de la organización ilícita detectó que el resto del dinero fueron transferidos a más de 50 cuentas de billeteras virtuales nacionales y del exterior.

Cripto
Asimismo se solicitó colaboración del Equipo Especializado en Análisis de Cripto Activos de la Procuración General de la Provincia de Buenos Aires, logrando identificar a cada uno de los beneficiarios; por ello, la fiscalía solicitó las ordenes de allanamientos y exhortó a la provincia de Chaco, donde una vez realizadas las medidas de rigor se logró determinar que gran parte de los beneficiarios son personas vulnerables, de bajos recursos que habrían abiertos las cuentas y entregadas las claves a otro eslabón de la organización a cambio de dinero. Vale remarcar que este modo operatorio es frecuente en las organizaciones criminales de estafas digitales.
Más adelante, se logró dar con dos involucrados que se comprobó que transformaron el dinero en cripto monedas; a éstos se le secuestró celulares y dispositivos electrónicos que serán peritados para avanzar hacia los organizadores de este tipo de delitos.
Malware y estafa
Tal como hemos dado cuenta en otros informes; esta maniobra delictual tiene su génesis en un mail que recibió la empresa pyme que opera en el Parque Industrial de Quilmes sito en Camino General Belgrano, la cual permitió el ingreso de un malware –virus- que permaneció en la computadora hasta que los delincuentes informáticos visualizaron el saldo bancario y activaron el mismo; seguidamente la organización ya contando con las cuentas de destino, realizaron múltiples transferencias para dificultar el rastreo del dinero.
De este tipo de delitos son víctimas las pymes que por lo general carecen de medidas de seguridad, antivirus, actualizaciones de software y supervisión por personas idóneas, lo que las hace vulnerables a este tipo de ataques de ciberdelincuentes causando un perjuicio económico considerable en el erario de las firmas.